Un hogar para Noni. Noni tiene unos dos años y ha vivido en las circunstancias más dificiles, su hogar era una perrera de cemento de aproximadamente 1m2, os podeis imaginar lo que eso supuso para este joven perro. Pero parece que Noni quiere olvidar todo lo malo que le ha pasado hasta ahora y se lanza de lleno a su nueva vida. Disfruta de la libertad de poder correr en el refugio, de tener contacto con nosotros los humanos y con otros perros, y lo mejor del día son los paseos en los que hay tantos olores nuevos y desconocidos que oler. Noni se ha metido rápidamente en nuestros corazones, aún tiene mucho que aprender pero se esfuerza y es feliz cuando se le elogia y se le premia con mimos.
Le deseamos a este noble y hermoso perro una familia cariñosa que haga muchas cosas con él y donde pueda vivir como un miembro más de la familia.